Manifestantes en Sri Lanka (2021). Imagen: Correio de Piedade.

  • El primer ministro de la isla, Mahinda Rajapaksa, dimitió el pasado 9 mayo debido a la ola de protestas generada por la crisis económica
  • Su hermano y presidente del país, Gotabhaya Rajapaksa, afirmó que el nuevo Gobierno evitará que Sri Lanka “caiga en anarquía”

Sri Lanka vive una serie de fuertes protestas desde hace varios días, fruto de la inestabilidad por la que pasa su economía. En 2019, los atentados islamistas de Pascua provocaron un notable descenso del turismo, que se unió a una crisis de liquidez y, junto a la pandemia de COVID-19 de 2020, sumieron a la isla en una grave crisis económica. Una crisis que llevó a que el país asiático se viese obligado a suspender temporalmente el pago de su deuda externa.

En la última semana, la intensidad de las protestas aumentó y dejó un total de 9 muertos y más de 300 heridos. Tales costes humanos se debieron, en buena parte, a la orden del Gobierno de disparar al cuerpo a cualquier persona que fuese hallada vandalizando bienes públicos o privados.

Por ello, el que hasta el lunes 9 de mayo había sido el primer ministro de Sri Lanka dejó su cargo y fue sustituido, el jueves 12, por Ranil Wickremesinghe. El presidente del país, y hermano del ex primer ministro, Gotabhaya Rajapaksa, aseguró que el nuevo Gobierno que se comenzó a formar ayer, viernes 13 de mayo, evitará que la isla “caiga en anarquía”.

El nuevo Ejecutivo promete una reforma de la Constitución, un refuerzo del poder del Parlamento y un programa nuevo que estabilice al país y permita alcanzar el consenso social. La oposición, por su parte, liderada por el partido del Poder del Pueblo Unido, parece ir a negarse a formar parte de este Gobierno, al considerar ilegítimo al primer ministro, a quien le exigen que su elección sea ratificada por el Parlamento.

Todo parece indicar, por tanto, que las protestas y la inestabilidad política continuarán en el país a pesar del cambio de Ejecutivo; tanto en el plano institucional, con la oposición parlamentaria, como en el social, con los manifestantes antigubernamentales, que se siguen mostrando insatisfechos.

Entre tanto, el Poder Judicial ha impedido a Mahinda Rajapaksa, el antiguo primer ministro, y a algunos de sus colaboradores, entre ellos su hijo y ex ministro de Juventud, Namal Rajapaksa, salir de Sri Lanka. Tal decisión viene dada a causa de los actos de violencia” cometidos desde el Gobierno contra los manifestantes en estos días, que deberán ser investigados y, si se diese el caso, juzgados.

 

Pável Carballido. Jefe de Internacional y redactor.

“Lo más revolucionario que una persona puede hacer es decir siempre en voz alta lo que realmente está ocurriendo”. Rosa Luxemburgo