Selección noruega de balonmano playa. Imagen: Federación noruega de balonmano playa.

  • Las protestas comenzaron en julio, cuando la selección noruega se negó a usar el bikini reglamentario
  • La Federación Europea de Balonmano (IHF) obliga a las deportistas femeninas que lo deseen usar pantalones “cortos y ajustados” en vez de bikini 

La equipación de las jugadoras de balonmano femenino ya no será un bikini, sino un conjunto de camiseta y pantalón ajustados. La selección noruega de balonmano playa comenzó su lucha contra la ropa sexista en julio, con motivo de la celebración de la Competición Europea de Balonmano Playa, en Bulgaria. Las nórdicas se negaron a usar el bikini reglamentario, por lo que fueron multadas con 1.500 euros.  

Tras cinco meses de reivindicaciones en redes y debates sobre la desigualdad con respecto a los uniformes de los equipos masculinos y femeninos, el martes 2 de noviembre, la Federación Internacional de Balonmano (IHF) estableció una modificación. El reglamento recoge ahora, en su artículo 4, que a partir del 1 de enero de 2022: «El uniforme consiste en una camiseta sin mangas ajustada al cuerpo, pantalones cortos ajustados y accesorios permitidos»

Esto supone un avance respecto a la equipación anterior que consistía en: «Un bikini donde la parte superior debe ser un sostén deportivo ajustado con aberturas en los brazos. La parte inferior no debe tener más de diez centímetros en los lados». Sin embargo, numerosas jugadoras siguen considerando sexista esta vestimenta y entienden que es injusto que se les imponga esta indumentaria.

Esta medida llega tan solo un mes después de que los ministros de Deportes de Dinamarca, Noruega, Suecia, Islandia y Finlandia (Joy Mogensen, Abid Raja, Alice Bah Kuhnke, Lilja Alfreosdóttir y Annika Saarikko, respectivamente), enviaran una carta a la IHF solicitando la actualización de la vestimenta. 

Pese a la aparente conformidad de las noruegas, las jugadoras españolas no comparten la alegría de sus compañeras. En la competición nacional se puede elegir desde 2014 entre camiseta y pantalón o bikini. Muchas jugadoras españolas coinciden en que con esta medida “se vuelve al punto de partida”. Así, consideran que no se ha conseguido igualar las equipaciones, se ha sustituido el bikini por un uniforme ceñido, que no tiene nada que ver con la ropa con la que juegan sus compañeros masculinos.

Voces del balonmano playa español recalcan que es injusto que se les obligue a usar esa ropa. Muchas de ellas señalan que se sienten más cómodas usando el bikini y añaden que deberían de poder elegir, como venían haciendo desde 2014. 

Tal y como explica Asunción Batista, jugadora de la selección española de balonmano playa: “Se ha dado un golpe en la mesa por un tema sexista/machista, pero de nuevo vuelven a elegir algo de manera sexista y machista”. Entiende que el hecho de que la IHF les obligue a jugar con ropa ajustada no es una respuesta a lo que se estaba reclamando. 

La polémica por la indumentaria en el deporte femenino no se limita solo al balonmano playa. El voleibol playa femenino, o quizás el caso más llamativo, el fútbol americano femenino son otros ejemplos. 

 

Marina García. Jefa de redes sociales e imagen corporativa y redactora.

“Los periodistas servimos para ayudar a los ciudadanos a serlo. A ser libres y capaces de gobernarse a sí mismos”. Joaquín Estefanía

Califica este post