Primož Roglič, Jonas Vinegaard, Wout Van Aert y Steven Kruijswijk tras ganar la etapa final de la carrera ciclista Criterium du Dauphine. Fuente: @davidstockman_photographer vía Twitter.

  • 34 años después Jonas Vingegaard recupera el título para Dinamarca 
  • Esta edición estuvo marcada por la dificultad de la ola de calor que los deportistas tuvieron que sobrellevar

El Tour de Francia finalizó ayer, domingo 24, en los Campo Elíseos de París, con un buen sabor de boca para el danés, Jonas Vingegaard, que se impuso al actual campeón, el esloveno Tadej Pogačar por 3 minutos y 34 segundos. 

Su equipo, el Jumbo-Visma se proclamó campeón de “La Grande Bouclé, con dos victorias de etapa en Hautacam y el Col du Granon con un dominio espectacular durante toda la carrera. El segundo puesto fue para el antiguo campeón Tadej Pogačar, quien no pudo hacer nada contra los movimientos del danés. El podio lo cerró el británico Geraint Thomas con un gran resultado. 

Vingegaard, con 25 años, se ha convertido en el primer ciclista danés que conquista la máxima prueba del ciclismo mundial desde Bjarne Riis en 1996. El año pasado, la situación también estuvo reñida entre el danés y el esloveno Pogačar. El danés se dio cuenta de que tenía las condiciones para pelear por el título cuando dejó atrás a Pogačar en el ascenso al mítico Mont Ventoux. Por lo que supo reaccionar arrebatándole el título que finalmente ha podido conseguir este año, tras un par de magistrales actuaciones en los Alpes y los Pirineos. 

Hace tres semanas, en Copenhague, Jumbo-Visma emprendió la ronda gala con dos líderes: Vingegaard y Primož Roglič, tres veces campeón de la Vuelta a España. Pero Roglič se dislocó un hombro, por lo que quedó atrás de Pogačar en el tramo de adoquines de la quinta etapa y Vingegaard quedó como el único líder. A partir de ahí, superó todas las expectativas. 

En la primera gran etapa de montaña subió al Col du Granon para apoderarse del maillot amarillo y consiguió arrebatárselo al esloveno, que se quedó dos minutos atrás de esa jornada. Además de su victoria general, Vingegaard también se proclamó campeón de la montaña.

La victoria de Vingegaard se hizo camino en los Pirineos, al ganar una segunda etapa en la estación de Hautacam. El danés dejó atrás al esloveno en la última gran etapa de montaña este año, abriendo una brecha de más de tres minutos. 

Finalmente, Pogačar se rindió a falta de cuatro kilómetros de la meta en el último ascenso y renunció así a su tercer título consecutivo. Peleó hasta el final, sin embargo, no pudo hacer nada contra Vingegaard, quien volvió a ser más fuerte en la contrarreloj del sábado para acabar de sentenciar el título.

«La batalla que tuve con Jonas por el maillot amarillo fue muy especial. Creo que vamos a tener dos o tres años muy interesantes. Jonas dio un paso al frente este año», dijo Pogačar. 

El campeón del Tour reveló que se enamoró del ciclismo por Alberto Contador, otro escalador de este deporte. En 2010, después de los dos triunfos del madrileño, el Vingegaard adolescente, que tenía 14 años, pidió a su padre viajar a Francia para subir los mismos puertos que él.

Claus, su progenitor, contó que tardaron un poco, pero que en 2013 le hicieron el regalo al joven. Fueron a los Alpes. “Subió el Glandon, la Croix de Fer, el Galibier y el Alpe d’Huez. Algunos varias veces. Yo le seguía en coche porque tenía 17 años y yo ya no podía aguantarle”, reveló el padre.

 

Laura Piqueras. Redactora.

“Ninguna existencia puede ser válidamente realizada si se limita a sí misma”. Simone de Beauvoir