La selección española femenina en la fase de clasificación para el Mundial 2023. Imagen: @SEFutbolFem vía Twitter.
- Vilda insiste en que no hay tanta tensión como se ha hecho ver en los medios
- Las jugadoras admiten la existencia de discrepancias entre el entrenador y el cuerpo técnico
El vestuario de la selección de fútbol femenina se encuentra dividido tras pedir la dimisión del entrenador y seleccionador Jorge Vilda, por parte de un gran número de jugadoras.
Las de la selección hicieron saber que es necesario un cambio antes del Mundial de Australia 2023. A esto se suma lo ocurrido en la Eurocopa, que se jugó el pasado julio, donde las españolas cayeron en los cuartos de final contra Inglaterra.
No obstante, tras conocerse la situación se produjo una división de opiniones entre las jugadoras y algunas, a la hora de la verdad, se echaron para atrás. La mayor de las diferencias se produjo por edades y no por clubes.
El seleccionador, desde el primer momento, transmitió a sus profesionales y a la prensa que no tiene en mente presentar su dimisión ya que piensa agotar su contrato, vigente hasta 2024. Además, cuenta con el apoyo del presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales.
Asimismo, Jorge Vilda es también director deportivo de fútbol femenino en la RFEF, puesto encargado de nombrar y cesar al míster, por lo que tendría que echarse a sí mismo.
La noticia no ha pillado por sorpresa en los despachos de la Federación debido a los distanciamientos tras la Eurocopa. Alexia Putellas, Irene Paredes y Patri Guijarro, las tres jugadoras del Barça, hablaron primeramente con el presidente de la Real Federación Española de Fútbol. Más tarde, durante la convocatoria del equipo en Las Rozas se produjo una reunión en la cual las demás jugadoras comunicaron personalmente su postura a Vilda, según El Confidencial.
El pasado jueves, 1 de septiembre, la selección ofreció una rueda de prensa donde, tanto Vilda como las capitanas, hablaron por separado. Primero el seleccionador, respaldado por el cuerpo técnico, dio su punto de vista ante los medios y explicó cómo se sentía tras lo ocurrido: «Se han traspasado los códigos del fútbol. Lo que pasa en el vestuario se habla y se queda en el vestuario. Soy una persona dialogante y mi puerta siempre está abierta para quien quiera hablar».
Vilda protestó sobre el procedimiento de hacer las cosas, pero afirmó ser una persona fuerte. “Tenemos que estar atentos a las jugadoras que se ponen esta camiseta y la defienden al 100%. De momento no ha habido ninguna jugadora que me haya dicho que no quiera estar aquí«, aseguró en la rueda de prensa.
Además, analizó la polémica tras filtrarse unas conversaciones internas con sus jugadoras y respondió: «Igual la situación que se vive desde fuera es mucho más tensa que realmente la que se vive dentro. No hay clima de normalidad, claro que afecta todo. Yo tengo que atender a las actitudes, a sus entrenamientos y a cómo afrontar el partido”.
Y respecto a las acusaciones publicadas por la prensa contestó: “Un día soy autoritario, otro blando, se han publicado muchas cosas que no son verdad. Me da mucha rabia que todo este tema mediático haya eclipsado el éxito de la sub-20”.
Sin embargo, las jugadoras de la selección, contrarias a la gestión de Vilda, se quejaron de la baja exigencia de los entrenamientos y de los planteamientos del seleccionador.
Tras las declaraciones de Jorge Vilda, empezó el turno de la rueda de prensa de Irene Paredes, Patri Guijarro y Jennifer Hermoso, las capitanas y veteranas del equipo; el resto de las jugadoras se encontraban en la primera fila de la sala de prensa de la Ciudad de Fútbol de las Rozas (Madrid).
Las capitanas afirmaron nada más empezar que estaban allí por voluntad propia y en representación de todo el equipo. “Quiero aclarar que en ningún momento hemos pedido la destitución de Jorge, hemos transmitido el sentir de las jugadoras, nada más. Como capitanas tenemos la responsabilidad de transmitir esa información. Ha habido muchas filtraciones falsas”, explicó Irene Paredes.
Patri Guijarro y Jennifer Hermoso afirmaron el sentimiento de “malestar general” que hay dentro del equipo con el cuerpo técnico desde el final de la Eurocopa. Irene Paredes mandó un último mensaje: “El grupo quiere mejorar como equipo, pero somos conscientes de que jugamos al fútbol, nada más. No decidimos nada. Nos han transmitido que se va a cambiar la situación”.
Quién es Jorge Vilda
Jorge Vilda Rodríguez es el entrenador y director deportivo de la selección española femenina, hijo de Ángel Vilda y preparador físico de Johan Cruyff en su época dorada en el F.C. Barcelona.
Vilda siempre ha estado ligado al fútbol femenino y fue junto con su padre con quien empezó en el año 2010, tras ser nombrado entrenador de la selección femenina Sub-17 sin tener ninguna experiencia previa, a la vez que su padre lo era de la Sub-19.
En 2015 reemplazó a Ignacio Quereda tras 27 años como entrenador de la selección absoluta, época que acabó después de que las jugadoras pidieran su dimisión tras el mundial. El asunto llegó a manos del entonces Presidente de la RFEF, Ángel María Villar, quién debido a la declaración de las jugadoras de no volver a representar a la selección, tuvo que poner al mando a Jorge Vilda.
Este también ostenta el cargo de director técnico de la RFEF, lo que le convierte en el máximo responsable de todas las categorías del fútbol nacional femenino y de nombrar y cesar a los entrenadores.
Diversas polémicas le han rodeado durante su carrera como profesional en el fútbol; entre ellas, la forma en la que llegó a entrenador debido a la estrecha relación con la entonces directora de la selección, María José Claramunt, quien tuvo un papel decisivo en la elección de Vilda.
Más tarde, también molestó su cambio de opinión en la candidatura a Presidente de la RFEF, ya que en un principio dio su apoyo a Juan Luis Larrea. Pero, repentinamente, cambió su voto a Luis Rubiales. Se rumorea que Rafael Amo, Vicepresidente de la RFEF encargado del fútbol femenino, estuvo detrás de esta decisión.